En el caso de existir dos titulares en una hipoteca, nuestra recomendación es realizar dos seguros de vida, uno para cada uno de ellos, y por el importe íntegro de la hipoteca, con el fin de cubrir económicamente al sobreviviente mediante la cancelación de la hipoteca y con una cantidad extra que le dé cierta estabilidad financiera.

Es preferible tener un seguro de vida que cubra un capital suficiente como para pagar la hipoteca, ya que nos veremos respaldados por la indemnización correspondiente en el caso en el que ocurriese un fallecimiento prematuro, y una cantidad más para hacer frente a los gastos y facilitar la nueva situación con menores ingresos.

Si designamos como beneficiario del seguro de vida para la hipoteca al banco o caja que nos concedió el préstamo, tenemos que recoger expresamente en las escrituras que el importe recibido por el banco o caja queda limitado al de la deuda restante en el momento del fallecimiento y que será utilizado únicamente en la amortización de esa deuda.

Si aún no cuentas con seguro de vida para tu hipoteca, podrás encontrar ayuda profesional y personalizada en nuestra web, en la que un equipo de expertos ha analizado para ti las mejores opciones existentes en el mercado y puede asesorarte de forma gratuita para que contrates tu seguro y protejas económicamente a quienes más te importan.

Y si ya tienes contratado es el seguro de vida para hipoteca con el banco o caja, debes saber que no tienes ninguna obligación de mantenerlo, sobre todo porque, en general, las condiciones que ellos te ofrecen son menos favorables que las del mercado asegurador. Comprueba tu caso realizando una comparación en esta web. Puede que te sorprendas con un ahorro de hasta el 50 %.