La mayoría de la gente necesita un préstamo hipotecario para comprar una vivienda. A la hora de solicitarlo, se conforman con comprobar si pueden hacer frente a la mensualidad que el banco les pide y con lamentar los muchos años que les quedan por pagar. Sin embargo, podrían pagar menos con solo revisar el seguro de vida hipoteca.
Solicitar un préstamo hipotecario para pagar una vivienda conlleva un montón de gastos: comisiones de apertura, notario, impuestos.. y también seguros. El banco no querrá prestar el dinero si el solicitante no se hace un seguro de vida que garantice a la entidad que alguien va a devolver la cantidad adelantada en caso de que ocurra alguna desgracia.
Las compañías aseguradoras están para eso, para devolver el dinero al banco si la persona que ha solicitado un préstamo muere o sufre una invalidez que le imposibilita para afrontar la deuda. Los bancos, lógicamente, imponen que quien pide dinero tenga un seguro de vida; suele ser una condición necesaria antes de prestar el dinero que permita la compra de la casa. Es lógico. Y sería una irresponsabilidad no tener ese seguro, porque en caso de muerte o invalidez, el desamparo sería terrible. Es imprescindible que una compañía de seguros se haga cargo de la deuda y que los herederos o el propio interesado en caso de invalidez no se vean obligados a quedarse en la calle por no poder afrontar sus obligaciones económicas.
Pero si bien el banco que presta el dinero está en su derecho de no conceder un préstamo si no hay un seguro, no puede obligar a que ese seguro se firme con su propio grupo o con la aseguradora que trabaje para su entidad. El cliente hará bien en buscar otras ofertas más ventajosas, porque podrá ahorrar considerables cantidades si no contrata el seguro con el banco o con la compañía que el banco proponga, porque una cosa es cierta: será más caro que si lo contratamos por nuestra cuenta.
El Proyecto de Ley Reguladora de los Contratos de Crédito Inmobiliario ya no permite vincular los seguros a las hipotecas, una práctica habitual de los bancos que venden estos seguros a sus clientes a cambio de ofertarles mejores condiciones en el tipo de interés. Ahora, cuando el cliente presente un seguro más ventajoso, el banco tendrá que aceptarlo, y sin cobrarle nada por estudiar si es mejor o no, cosa que antes sí hacían.
Revisar el seguro de vida hipoteca
¿Cuándo conviene revisar el seguro de vida hipoteca? En cualquier momento. Así de sencillo. En segurodevidahipoteca.es tenemos casos cada mes que suponen ahorros muy considerables; algunos de hasta 7.900 € anuales de diferencia por trasladar el seguro de hipoteca del banco a una compañía aseguradora. Es una cantidad nada despreciable, pero aunque fuera menos, no hay por qué pagar de más si podemos contar con un buen seguro de vida hipoteca, por menos dinero, que cubra lo que necesitamos.
El seguro de vida hipoteca se puede dar de baja antes de los 30 días, una vez que nos han concedido la hipoteca, aunque en ese momento ya deberíamos tener una alternativa, porque no debemos estar ni un momento sin seguro: nunca se sabe lo que puede pasar y no debemos jugarnos nuestro futuro ni el de quienes más queremos, nuestros hijos, nuestra pareja…
Si ya estamos pagando un seguro, podemos cambiar de compañía cuando queramos. Por ejemplo, cuando vaya a vencer la póliza, que tendrá carácter anual, es un buen momento para plantearse un ahorro.
En ocasiones, el banco solo exige al cliente que presente un seguro de vida alternativo si quiere cancelar su póliza de seguro de vida hipoteca. Quizá haya que insistir, pero seguro que estarán dispuestos.
En otros casos, puede que la entidad quiera subir el interés diferencial si nos empeñamos en revisar el seguro de vida hipoteca. Pero, calculadora en mano, seguro que nos resultará más ventajoso aunque nos penalicen. Y ojo, porque solo podrá subir el interés si consta en la escritura que está condicionado a la contratación del seguro con la entidad.
Pasos para contrtar el seguro de hipoteca fuera del banco
La mayoría de los bancos tienen sus condiciones: domiciliar la nómina, tener tarjetas de débito y crédito con ellos (y utilizarlas), mantener un saldo mínimo determinado…, pero no pueden pedir que se contrate el seguro con ellos. Si el cliente presenta una nueva póliza alternativa, el banco deberá aceptarla.
Si todavía no hay seguro
Cuando aún no hay un seguro de vida hipoteca contratado, lo más sencillo es entrar en nuestro comparador de seguros y ver precios y, muy importante, también las prestaciones que ofrece cada compañía. Así sabremos cuál es el seguro más ventajoso para nuestro caso y comprobaremos que nos va a salir hasta un 70 % más barato que con el banco.
Es importante que en estos seguros de vida hipoteca conste que el banco será el beneficiario solo por el importe que reste por pagar de la hipoteca en el momento de cobrar el seguro.
En nuestro comparador se pueden ver también prestaciones de cada seguro, pero si no queda claro, llámanos; siempre habrá un corredor de seguros experto dispuesto a asesorarte personalmente.
Si ya existe un seguro contratado
- Si ya tenemos un seguro de vida contratado con el banco, habrá que leer las condiciones de la hipoteca, y si consta que puede subir el diferencial cuando no existan productos vinculados, recomendamos entrar en nuestro calculador de penalizaciones y ver si así todo nos resulta más barato cambiarnos de compañía, lo que es prácticamente seguro.
- Habla con tu banco y diles que no deseas renovar el seguro de vida hipoteca con ellos.
- Pide que te faciliten el modelo de carta para anular el seguro, o más fácil: rellena el modelo que te proponemos aquí.
- Envía la carta por correo certificado a la compañía aseguradora con la que tengas el seguro.
- Si te parece complicado, llámanos y nos encargaremos de todo: de gestionar tu baja en la compañía anterior y de que al momento tengas otra póliza más barata con las coberturas que realmente necesitas.
Ya lo ves: si quieres ahorrarte dinero, te conviene revisar el seguro de vida hipoteca cada año.