Las hipotecas VPO representan un concepto diferente de préstamo hipotecario. Es necesario conocer sus características básicas para entender qué representa para el cliente contratar una de estas hipotecas subvencionadas y cómo funcionan. De esta manera, es más fácil saber cómo pueden manejarse para que resulten beneficiosas para los usuarios.

¿Qué son estas hipotecas subvencionadas VPO?

Antes de analizar el funcionamiento de las hipotecas subvencionadas, es importante conocer qué son en realidad las VPO, ya que sus características determinan la existencia de este tipo de préstamos hipotecarios.

Se trata de viviendas de protección oficial. Es decir, están subvencionadas por las Administraciones públicas y, por tanto, tienen un precio limitado. Su principal objetivo es favorecer que las rentas más bajas puedan acceder a una vivienda adecuada por un precio más reducido de lo habitual.

Una de las características de estas casas es que pueden adquirirse con las denominadas hipotecas de vivienda protegida, que tienen unas características muy concretas tanto en su concesión como en su modo de funcionamiento.

Las hipotecas de vivienda protegida

Es importante señalar que estas hipotecas no son concedidas por las Administraciones públicas, sino por entidades financieras que se han acogido al convenio de las VPO.

Estos préstamos hipotecarios están diseñados para que los usuarios puedan adquirir una primera vivienda en las mejores condiciones posibles, dependiendo de los acuerdos entre las distintas Administraciones locales y autonómicas.

Esencialmente, las hipotecas VPO se caracterizan por llevar asociado un tipo de interés fijo en los primeros años para después pasar a vincularse al euríbor. De todos modos, al llegar a este punto tienen un diferencial más bajo que el resto de hipotecas básicas. De hecho, el tipo de interés aplicable se acuerda cada año por el Consejo de Ministros con el objetivo de garantizar su control.

Además, hay que tener en cuenta que estas hipotecas subvencionadas tienen un habitual periodo de carencia. Además, su amortización es siempre a un plazo más largo.

Otro aspecto interesante que debes tener en cuenta es que las entidades que trabajan con hipotecas de vivienda protegida no pueden cobrarte ningún tipo de comisión por conceptos relacionados con estos préstamos.

En definitiva, este tipo de hipotecas está diseñado para cumplir con el planteamiento de las viviendas protegidas y facilitar el acceso a un alojamiento digno a un coste razonable.

Requisitos especiales para poder acceder a una hipoteca VPO

Además de conocer las características de este tipo de hipotecas, quienes quieran acceder a una de ellas deben cumplir una serie de requisitos fundamentales, ya que estas viviendas no forman parte del mercado habitual.

Así, para acceder a la titularidad de las VPO –y poder disponer de la consiguiente hipoteca– es indispensable que la vivienda que se compre vaya a ser usada como domicilio habitual. Es decir, no puede tenerse como segunda residencia ni pensarse en alquilarla como inversión. Tampoco puede venderse hasta que se liberalice, es decir, hasta que pierda la calificación de vivienda de protección oficial. Este proceso lo inicia el titular y consigue que el precio que puede pedir por ella pase a ser el que dicte la ley de la oferta y la demanda.

Ayudas económicas relacionadas

Finalmente, es importante destacar la existencia de una serie de ayudas económicas directas a la financiación de las VPO y las hipotecas que se conceden a las viviendas de protección oficial. En este grupo se incluyen la concesión de subsidios a los préstamos, el abono de una cantidad fija por parte del organismo público correspondiente y cualquier otro tipo de subvención habitual.

¿Necesitas acceder a una casa por un precio razonable? Descubre cómo las hipotecas VPO pueden ayudarte a cumplir con tu objetivo.